Namasté

Dos personas son pareja en la otra vida. Alexa, una chica relajada y tranquila, vestida con el estilo hippie, vive una vida alegre. Manuel, una persona contraria a Alexa, pues es serio, reservado que sólo ve por su trabajo. Alexa, conoce muchas personas, al final dio con el ideal, pues se quedó con él. Pero ambos caen con una enfermedad, siendo separados por la muerte. Estando en el cielo se reencuentran, poniéndose de acuerdo para estar juntos en la siguiente vida.

Son las siete de la mañana y dos niños juegan en un parque donde hay mucha gente,

Alexa de niña –Hola ¡Qué lindo eres!

Manuel sonríe y le responde "Hola" solamente, por pena.

Manuel de niño –Hola.

Luego Alexa no puede olvidar la cara de este niño y no entiende por qué.

De grandes se encuentran, pero Manuel no se percata de Alexa, mas ella lo ve pasar en un instante de tiempo sin que pase nada emocionante. 

Alexa, una chica morenita, cabello castaño medio, de 1.60 centímetros, ojos marrones, de lentes, trastornada con una vida incierta, consumida por el miedo, temor, impulsividad y tristeza, anda en guerra con el mundo por no estar bien consigo misma, debido a que no se deja amar y no ve el lado bonito a su vida. En cambio, Manuel es un chico moreno, ojos negros, cabello negro liso, de lentes, cuya forma de ser es contraria a ella, pues es relajado, tranquilo, paciente y no le tiene miedo a nada. Alexa es escritora y Manuel es astrólogo y sanador espiritual. 

Alexa ha vivido de capricho en capricho, de ilusión en ilusión, conoce un chico y luego otro y otro, pero ninguno la enamora ni le llenaba, menos la ayudaban a hallar el origen del problema, pues al contrario, la ahogaban más en un pozo sin salida, se sentía que la iban apagando poco a poco sin encontrarle sentido a su vida. Obstinada de vivir sin resultado en el amor, no encontraba el ideal y cuando sentía que así sucedía, nada que se daba lo que quería, vivía peleando pues pensaba que en el amor si no duele, no valía la pena y lloraba mucho diariamente. 

Un día, quiso poner fin a esa situación, decide viajar a la India, se traslada al aeropuerto y emprende el vuelo en busca de respuestas a su vida, pues nadie logra dar con el nido de su mal. Una vez en la India, descubre mucha gente y toda una sociedad en situación un poco desordenada, convive un tiempo en Nueva Delhi, pero no se logra adaptar, mas decide meterse más hacia los adentros del país y de repente se halla en un lugar de paz y bailes típicos de la cultura India, pero seguía igual, en eso conoce dos chicas que resultan ser sus amigas, las cuales han ido motivándola en su proceso de sanación, ellas le hablan de un personaje que trabaja de manera sanadora con los clientes, pero Alexa escoge otras formas de curarse por su cuenta. Sus dos amigas, una morenita, cabello rizado, alta, ojos marrones llamada Isabella y la otra blanca, cabello negro, ojos negros de nombre Ángela invitan a bailar a Alexa, ella no está muy animada, pero al final se dejó convencer, asisten a una fiesta donde personas vestidas de trajes típicos de la India, como el Sari, bailan al ritmo de la música tradicional. Alexa aprende con sus amigas los pasos de baile y se divierte con ellas. Mientras mueven sus caderas y se liberan de tensiones y entregándose al poder que tiene la música de dejarnos llevar y olvidar amarguras, se ponen de acuerdo para un día diferente en el río al otro día:

Ángela -¿Qué les parece ir al río mañana?

Alexa -¿Río, qué río?

Isabella - Uno que queda al salir de la ciudad, dicen que es bueno para depurar malas energías ¡Vamos! ¡Te encantará!

Alexa –Es que no estoy muy segura

Ángela e Isabella – ¡Anda Vamos!

Alexa –Está bien, vamos

Ángela e Isabella -¡Sii vamos! 

Se hace tarde, deciden salir de la fiesta e irse cada una a dormir. Se despiden y toma cada una su destino. Alexa, entra a su casa, se arregla para dormir, estando en la cama, està pensando en el día tan increíble que tuvo con sus amigas y se duerme. 

Llegan las amigas de Alexa a su casa:

Ángela e Isabella -¡Vamos amiga! ¡Alexa despierta! ¡Se hace tarde!

Alexa abre la puerta y sale vestida y arreglada con un bolso playero que contiene protector solar, lentes de sol, dinero, llaves y galletas para compartir.

Alexa – ¡Hola amigas! Estoy lista ¡Vámonos!

Ángela e Isabella -¡Sii Vámonos!

Se reúnen y van al autobús, estando ya en la zona del río, se bajan del autobús, se acercan al río, quedan en traje de baño y se meten a bañar las amigas, de repente Alexa queda en traje de baño, todos de dos piezas, mas se frena porque considera que esta muy fría y un poco solitario el sitio, pero las amigas la llaman a gritos para que se meta al río,

Ángela e Isabella -¡Dale Alexa entra al agua! ¡No seas miedosa no pasa nada!

Al final, Alexa se anima y se mete a bañar de una vez, disfruta con sus amigas, tanto que ellas deciden salirse y quedarse un rato afuera, mientras Alexa ama conectarse tanto con la naturaleza que el sanador se percata de su presencia y no deja de apreciar lo bonita de que es y su anatomía, pero Alexa no deja de bañarse ni de nadar de acá para allá, hasta que en una de esas que nada boca arriba se da cuenta que el sanador la está viendo, se asusta y se sorprende de verlo, pero no deja de verlo, pues le parece conocido, haberlo visto antes y estar con él en la otra vida, dice su nombre entre labios:

Alexa -¡Manuel!

Manuel – Hola ¿Como supiste mi nombre real?

Alexa no sale de su asombro, pero sí del río, él le entrega la toalla, ella se la pone encima y le responde

Alexa – No puede ser ¿Eres tú? ¡Te encontré!

Manuel - ¿Disculpa? Yo no te conozco ni nunca te he visto ¿Por qué dices eso?

Alexa más sorprendida aún le responde

Alexa –Porque he estado buscando esa persona que me acompañó en la otra vida y eres tú

Manuel- Imposible que sepas eso, pues eso es pasado que ya pasó antes de que volvieras a nacer ¿Cómo lo sabes? ¿Acaso eres vidente? ¡Qué bárbaro!

Alexa un poco apenada por la situación y sin querer dar más información,pues siente que Manuel y ella no se entienden, decide cortar la conversación de la manera más pedante que consiguió.

Alexa – Olvídalo, sólo me pareces conocido de cara, eso es todo, sobre todo por tu nombre, yo te he visto antes.

Manuel- Pero dime, no pasa nada

Alexa –No te conozco ni sé quién eres, así que no tengo nada que hablar contigo

Manuel – Pero espera ¡No seas así! Yo también soy vidente, tenemos un tema en común.

Alexa –Me voy. Déjalo así. ¡Adiós!

Alexa recoge sus cosas y se va con sus amigas, estas miran feo a Manuel y se retiran del río.

Al otro día, Alexa estando en su cuarto escucha que tocan la puerta con insistencia, se rehusaba a abrir, pero recibe a sus amigas quienes la invitan a meditar, ella se niega, pero le animan, pues para relajarse y tranquilizarce, sobre todo para olvidar lo sucedido con Manuel,pues entra al templo, se sienta, se coloca en posición de meditación, intenta concentrarse, pero lo abandona, ya saliendo se encuentra con Manuel quien la detiene con las manos en los brazos,

Manuel -¡Ven conmigo! ¡Déjame ayudarte!

Alexa –Yo no tengo nada que hablar contigo

Manuel –Por favor, no seas tan severa ¡Déjate sanar!

Alexa –Deja el fastidio

Alexa se va del templo, Manuel se queda sentido por la discusión con Alexa, ella se dirige a su casa, estando ahí de nuevo la visitan sus amigas, la invitan esta vez a bailar y ella procede a tomarle la palabra, se trasladan a la fiesta y bailan, sobre todo danza árabe e India, una mezcla de las dos culturas, cansadas de bailar, deciden comer algo, alternando la cena con risas y diversión, la pasan bien, Angela e Isabella regresan a la pista de baile, es entonces cuando se hace tarde y Alexa prefiere irse a su casa, en el camino se va sintiendo mal, llega a su casa, se acuesta en la cama y no deja de quejarse del dolor de estómago, sus amigas llegan a su casa extrañadas de que Alexa se haya ido de la fiesta, le dicen para que regrese a bailar,

Ángela –Amiga regresemos ¡Vamos a bailar!

Alexa –No puedo

Isabella -¿Por qué? La noche es joven y vamos a disfrutar

Alexa –Me siento mal

Ángela –Amiga no seas tonta, no hay nada que una cerveza pueda arreglar

Alexa molesta abre la puerta de la casa y discute con sus amigas, aún sintiéndose mal

Alexa –Miren, yo vine a sanarme ¡No a emborracharme!

Isabella –Si no quieres tomar, no tomes, pero ¡Vamos a bailar!

Ángela –Sii vamos a divertirnos

Alexa –me siento mal del estómago y no tengo ganas de salir

Isabella –Si eres aburrida, siempre hay que insistirte para que hagas algo, no eres divertida.

Alexa- Sii lamentándolo mucho, no soy igual que ustedes

Ángela -Está bien, haz lo que quieras

Alexa –Sí, dormiré

Ángela –Nosotras vamos a divertirnos

Alexa –Perfecto, hagan lo que quieran

 Las amigas de Alexa se fueron, no se volvieron a hablar más, pero Alexa no se sintió culpable, más bien, libertad y paz. Toma mucha agua, se acuesta a dormir, pero pasa la noche mal por el dolor de estómago. Al otro día, Manuel por medio de Ángela e Isabella, se entera que Alexa estuvo muy mal y discutieron, se dirige a casa de Alexa,

Manuel –¡Alexa por favor déjate sanar!

Alexa –Yo estoy bien y estaré mejor, no hace falta hacer eso.

Manuel –Deseo ayudarte, porque si no terminarás peor a cómo estás

Alexa –Por favor vete ya

Manuel no cede a su rechazo, insiste tanto que al final le dice:

Manuel – Esas son las entidades negativas que no te dejan vivir, déjame ayudarte, quiero sanarte, por favor.

Alexa se da media vuelta y se da cuenta que no pierde nada si lo intenta y se va con Manuel.

Deciden conectarse con la naturaleza caminando por un parque lleno de vegetación, donde Manuel le comenta a Alexa sobre la respiración, sobre todo de las costumbres de las personas positivas y negativas, sobre entidades negativas que se apoderan del cuerpo, especialmente, del hecho de ser una persona conectada con DIOS Y EL UNIVERSO. Alexa sólo escucha lo que Manuel le dice y al final le pregunta:

Alexa - ¿De qué manera me ayudará todo esto que me dices?

Manuel –A tener paz y tranquilidad contigo misma.

Pero Alexa no cree en eso y se va.

Alexa –Eso es puro cuento, no creo en eso. Chao.

Manuel la deja ir, pues hizo todo lo que pudo y ya se rinde, no puede hacer nada.

Pasan los días, Alexa escribe sobre su vida en India y experiencias vivida en su lapto sentada en la mesa en su casa, alternando su actividad con meditaciones, pero decide cocinarse una deliciosa cena, mas se da cuenta que necesita unos ingredientes y pues, se va al mercado, alegre empieza a apreciar los colores del mercado y su gente, entonces se topa con un puesto donde la señora la atiende amablemente y procede pues a venderle lo que Alexa necesita, pero inesperadamente se acerca un señor y le regala unas hojas con información sobre liberaciones espirituales, pero Alexa no está de acuerdo con estas cosas y se disponía a lanzarlas al suelo en señal de desprecio, cuando el señor le pide por caridad que las lea y practique lo que ahí dice para que se sienta bien. Alexa se queda pensando mientras ve al señor fijamente, al final acepta las hojas, sorprendida por lo sucedido, le paga a la señora del puesto y se va del mercado con la compra y hojas en mano.

En eso, en casa se sienta a leer la información de las liberaciones en voz alta, se entera a medida que va apreciando lo que ahí dice, que debe leerlo tantas veces como puede hasta deshacerse de lo negativo que se encuentra en su interior, se da cuenta que le puede ayudar, aunque no muy convencida de lo dicho en el papel, igual la curiosidad puede más y decide hacerlo. Pasa toda la noche en eso, lee que te lee y poco a poco nota los cambios, hasta que hace una pausa y recuerda lo dicho por Manuel, se queda en shock y en lo que termina se percata que es otra persona, pues lo negativo había desaparecido de su ser.

En eso, salió corriendo a buscar a Manuel y éste no está, se dispone a ir a todos lados en la ciudad a ver si lo ve en algún lado y en eso que ya pierde las esperanzas y se siente cansada, aparece Manuel detrás de ella

Manuel -¿Te gustaron las liberaciones que te hice llegar?

Alexa se queda callada, se voltea y sin saber qué hacer, lo abraza. Manuel se queda sin palabras, en eso se miran fijamente uno al otro, se iban a besar, pero por culpa de los nervios, Alexa interrumpe el momento y le dice a Manuel,

Alexa - ¡Sáname!

Y Manuel Felíz la toma de sus brazos y la lleva a su casa, estando ahí le conversa todos los pasos para renovarse interiormente y exteriormente, sobre todo de las limpiezas del aura y del alma, en esto incluye baños espirituales como el que había hecho anteriormente en el río y cambiar de actitud, pues para esto la invita al río para que entre los dos las energías sean más fuertes y beneficiosas por partida doble. Se quedan viendo uno al otro en el autobús como si no hubiera otra cosa que apreciar, mientras se ríen como amigos. Llegan al río, se bajan del autobús, corren como niños al río como si hicieran competencia, a ver quién llega primero, gana Manuel, quien se queda en short de baño y se mete en el río, Alexa se detiene, se quita la ropa, quedando en traje de baño de dos piezas, sin querer meterse en el agua, por estar muy fría, Manuel se devuelve por ella, la carga y la mete en el agua, Alexa se baña en el río con Manuel, echan broma en el río, se dan cuenta que se enamoran más uno al otro, justo cuando se iban a besar, Alexa decide nadar, hacen competencia de nado,

Alexa –Está vez te gané jejeje. Vamos a regresarnos, pues es tarde.

Manuel –Te dejé ganar jejeje. ¿Por qué? Es temprano y no hay apuro.

Alexa –Sí, sí hay apuro y es tarde

Manuel –No, no es tarde vale, tranquila, conmigo no te pasará nada.

Alexa –O me voy contigo o me voy sola

Manuel -¿Por qué me tratas así, por qué eres así conmigo, por qué reaccionas así?

Alexa –Tú quieres sanarme, pues ayúdame entendiéndome

Manuel –Eso trato, pero debes calmarte y confiar en mi.

Pues, Alexa y Manuel se pelean, se dicen de todo y se van molestos, estando en la ciudad se quitan el habla y se separan. Cada uno toma su rumbo a su hogar, pues enojados no querían ni verse a la cara.

Alexa cansada por el día tan movido que había tenido, empieza a reflexionar por lo sucedido con Manuel y se da cuenta que no se ha sanado como ha querido y menos ha logrado lo que quería en la India, entonces decide hacer cosas diferentes para lograr resultados diferentes, se duerme y al otro día, se dirige a la biblioteca que queda cerca de su casa, ojea diversos libros sobre espiritualidad y logra conseguir varios sobre liberaciones, Aura, etc, es entonces cuando se dirige a su casa, a medida que va leyendo los libros, se da cuenta que puede estar en sintonía con DIOS y el universo a través de la iglesia, la comida y limpieza espiritual, pues empezó a ir a la iglesia, lo que allá son templos de rezo, busco más a DIOS por medio del Arcángel Miguel, comió más sano y sabroso con recetas saludables y relajantes y por último, se echó baños de esos con sal marina y al final, logró lo que buscaba en India, soltarse lo malo y darle entrada a las cosas buenas de la vida, pues comenzó a darle gracias a DIOS apreciando donde estaba, pues salió a caminar y le sonreía a quien veía en el camino, respiraba aromas de las flores y de velas aromatizantes y abrazaba a quien conocía, cuando de repente se fue al mar y en el muelle observa todo a su alrededor, cierra los ojos y respira inhalando y exhalando el aroma de la naturaleza, simplemente se deja llevar por el momento y el sonido de los pajaritos, se relaja totalmente, sin percatarse de la presencia de Manuel quien la sorprende abrazándola por detrás y se da cuenta que ella le corresponde:

Alexa –Lo logré

Manuel –Lo logramos

Alexa –Lo hice yo sola

Manuel –Fue un trabajo en equipo, yo te guié, siempre recuerda que así como eres de bella por fuera, lo eres por dentro, que eres un ser extraordinario, no dejes que nadie apague tu luz y quienes les molesta que Se pongan lentes de sol, pues eres hermosa, vales mucho y mereces lo mejor. Te adoro.

Alexa –Te adoro, eres tan Bello, no sé cómo agradecerte.

Manuel –Yo sí.

En este preciso momento, Manuel besa a Alexa y ella se deja besar, también lo corresponde y son felices juntos, terminan juntos recorriendo el mundo y llevando sus enseñanzas de espiritualidad a todo al que conoce. Namasté.